«Ahora me llaman heroína, cuando antes solo era una simple limpiaculos», denuncia la enfermera.
El enorme impacto causado por la crisis de la pandemia de COVID-19 que azota nuestro país nos ha dado una vuelta a la cabeza en la percepción de varios temas. Se ha expuesto todo lo negativo de un sistema capitalista, hemos visto a las claras la hipocresía de las élites, se nos ha mostrado la imperiosa necesidad de una sanidad pública…
Una de estas cosas que ha perdido opacidad de cara a la opinión pública ha sido el trabajo de las enfermeras y enfermeros, primera línea de batalla en la lucha contra el coronavirus, independientemente de la falta de protección que se les ha dado. Todas forman un David enfrentándose a un Goliat invisible que puede matar sin tocarte.
Un comentario ha definido a la perfección esta situación de poca visibilidad del trabajo de las enfermeras, una reivindicación necesaria y que debería continuar en liza tras esta crisis sanitaria. M, una enfermera, publicó una fotografía en su muro de Twitter que se ha vuelto viral, tanto por sus palabras nítidas y sin pelos en la lingua, como por su defensa de la clase obrera.
«Es curioso, a día de hoy, sigo llevando el mismo traje y realizando el mismo trabajo, pero ahora me llaman heroína, cuando antes solo era una simple limpiaculos. ¿Ha hecho falta una pandemia para que empecéis a valorar los trabajos de la clase obrera? Si, somos imprescindibles», señalo M. Desde aquí no podemos hacer más que aplaudirla. Bravo, M.